Una intensa sequía es la causante de la disminución de los niveles de producción de miel en la región Huasteca hasta en un 40%, lo que ha generado preocupación entre los apicultores, teniendo en cuenta que regularmente, en esta zona, se producen más de 200 toneladas de este alimento.
Estos bajos niveles de recopilación de miel, son resultado de un extenso periodo sin la ocurrencia de precipitaciones que tienen lugar durante los meses de abril y junio, lo que impidió que la floración habitual se extendiera por los campos de la Huasteca.
Representantes de la agrupación Apícola Orizatlán (Apioriz), explicaron que anualmente ocurren dos cosechas, pero debido a la extensa sequía en 2024 solo pudieron completar una, lo que influye directamente en la economía de los productores de miel y en la del estado.
Baja producción y bajas ventas
Además de las dificultades generadas por la sequía, las estadísticas muestran que, con respecto a la comercialización de la miel, el 2024 no fue un buen año. Ángel Cruz Hernández, representante de la Apioriz, explicó que la mayoría de la producción era adquirida por compradores extranjeros ubicados especialmente en Asia, Europa y Medio Oriente, sin embargo, para el año en curso disminuyó la demanda, y por tanto la venta. A pesar del desolador panorama, los apicultores esperan recuperar las ventas y la producción para el 2025.
Hasta el momento, el precio por tonelada de miel de abejas se encuentra por encima de los 35 mil pesos.
Cambio climático y epidemias
Si bien en 2023 afectó el frío, en 2024 el panorama fue totalmente diferente, esto como consecuencia del cambio climático, que afecta la siembra y cosecha de muchos alimentos en el estado, en la nación y en el mundo.
Además, con la llegada a la entidad del mosquito Aedes-Aegypti, principal transmisor del dengue, el zika y la chikungunya, se dañan los apiarios y la reproducción de las abejas, pues los productores se mantienen en fumigación constante con insecticidas, para evitar la propagación de los mismos.