La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, firmó un decreto que establece un incremento del 35% en los aranceles a mercancías confeccionadas y un 15% a textiles importados, exceptuando a países con los que México mantiene tratados de libre comercio. Estas medidas buscan proteger a la industria textil mexicana, un sector estratégico que emplea a 400,000 personas y que en los últimos años ha enfrentado una caída significativa.
El titular de la Secretaría de Economía, Marcelo Ebrard, destacó que el decreto también amplía la lista de productos restringidos en el Programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX). Este esquema permite importar insumos intermedios libres de impuestos con la condición de que al menos el 80% de las mercancías sean exportadas. Sin embargo, el 48% de las fracciones incluidas no cumplió con esta norma, dejando los productos en el mercado mexicano y fomentando lo que Ebrard calificó como “contrabando técnico”.
Practicas que afectan los aranceles
Ebrard enfatizó que estas prácticas afectan la competitividad de la industria local al permitir la entrada de productos extranjeros bajo precios de dumping. Además, señaló que desde 2019 México ha importado más textiles de los que exporta, con un incremento del 0.8% en mercancías textiles y un 12.5% en confección.
Por su parte, Gabriela Siller, directora de análisis de Grupo Base, explicó que esta política también busca reducir las importaciones provenientes de China y evitar conflictos con la administración de Donald Trump, que retomará el liderazgo en Estados Unidos. Esta medida impactará a consumidores que adquieren productos a través de plataformas como Shein, Temu o AliExpress.
Los estados de Puebla, Hidalgo, Estado de México, Coahuila, Guanajuato y Jalisco concentran la mayor parte de la producción textil en el país. Según datos oficiales, el sector registró una caída del 4.8% en el PIB en 2024, lo que equivale a una pérdida de 1,129 millones de pesos y más de 79,000 empleos en los últimos años.
“El objetivo es fomentar el desarrollo de la industria textil mexicana, promover el empleo y garantizar condiciones justas de mercado”, concluyó Ebrard.
Quien subrayó la importancia de estas acciones para evitar que los productos importados compitan deslealmente con la producción nacional.